Son muchas las personas que aprecian más un buen Gin Tonic, que otro tipo de combinados, e incluso lo consumen a la salida del trabajo, como si se tratase de vino o cerveza, dos de las bebidas más consumidas a diario por los españoles y españolas, amantes de la tapa y la cañita en el bar. Es por esto que cada vez más establecimientos cuentan con una amplia y variada gama de ginebras diferentes, así como profesionales expert@s en la elaboración de los mismos. Porque preparar un buen Gin Tonic, no es tan fácil como parece. Requiere un arte especial, más que una técnica, y un saber jugar con los distintos ingredientes hasta conseguir un resultado perfecto. En este sentido todo es importante, desde los ingredientes hasta el modo de servirlo y de removerlo. Si quieres aprender a preparar un Gin Tonic perfecto continua leyendo este post, en sencillos pasos te enseñaremos a hacerlo.
Cómo preparar el Gin Tonic perfecto
A continuación te explicamos cómo se prepara un Gin Tonic, un combinado en el que no solo la elección de la ginebra es importante, sino también la de la tónica. Así mismo es fundamental contar con un hielo de calidad y detalles originales. Por último está la mano del barman/barwoman, y su toque mágico, esencial en coctelería.
Debes tener en cuenta que tanto la ginebra y la tónica, como la copa, han de estar bien frías. La elección de este último elemento es fundamental para obtener un buen resultado, aseguran en Exportcave, especializada en la fabricación de vasos , copas para cóctel y combinados y en copas especialmente diseñadas para GIn Tonic. En la actualidad, fabrican la marca Giona Premium Glass, garantía de calidad, ya que todos y cada uno de sus productos son elaborados en cristalino de alta calidad, lo que les aporta su brillo característico. Además, gracias al uso de nuevas tecnología de fabricación todos ellos cuentan con una alta resistencia. En caso de no contar con copas frías en el momento de su elaboración se pone hielo en la copa y se remueve hasta esparcirlo por toda la copa, y finalmente se retira el agua que el hielo derretido ha dejado.
No te preocupes y mete la ginebra en el congelador, ya que esta bebida alcohólica no se congela hasta alcanzar los -20ºc, sin embargo la temperatura de la tónica no debe descender de los 5ºc, de lo contrario puede llega a congelarse.
Una vez está la copa fría y llena de hielo hasta arriba, se añade la ginebra y la tónica en la siguiente proporción: 1/5 parte de ginebra y 4/5 partes de tónica. Para medir bien las cantidades se puede usar un medidor o jigger. Lo normal es echar unos 4 cl-6 cl para una copa las medidas pueden variar entre los 4 y los 6cl, algo menos si se quiere controlar el peso o evitar que se suba a la cabeza.
En cuanto a la elección de la ginebra eso va a depender del tipo de combinado que se desee. En la actualidad existen en el mercado diferentes tipos de ginebras como The Botanicals, Martin Miller o Nordés Gin, entre otras muchas más marcas. Un consejo, se un poco atrevido y prueba cosas diferentes. Puedes llevarte una sorpresa muy agradable. Otra cosa, a día de hoy se utiliza mucho el packaging como estrategia de marketing, y en ocasiones, no es oro todo lo que reluce. Una botella atractiva no tiene que contener un buen producto. Investiga antes de comprar.
La elección de la tónica, es otra cosa esencial, una mala decisión podría echar a perder el Gin Tonic, una bebida que es prácticamente tónica, ya que la cantidad de ginebra a añadir es muy baja. En cuanto al vertido, lo aconsejable es hacerlo suavemente para conservar el gas carbónico de la tónica y desde el ultimo hielo, dejándola caer por una cuchara imperial es muy bonito, si te hace ilusión, aunque te diré que no sirve para nada más que para impresionar a los clientes.
Por ultimo es fundamenta añadir un cítrico fresco, como el limón verde, y se puede añadir antes de la ginebra, para que la copa se impregna del aroma, si se deja para el final, los aceites aromáticos quedaran en la superficie del gin tonic. Otras solución es usar aromatizadores de coctelería.